Ya ha llegado el frío. Amaneció un día soleado pero era obligado ponerse todo el arsenal de invierno. Con el habitual sueño que me acompaña últimamente me presenté en el lugar habitual para salir con los compañeros de la sociedad. Penúltima salida del calendario 2009, sobre el papel una etapa corta con un par de rechillos y que se preveía tranquila. El comienzo así fue. A ritmo de charleta transcurrieron los primeros kilómetros por la zona de Alegría hasta que se encendió la mecha en el repecho de Dallo, el pelotón se rompió por unos instantes, de ahí hasta el siguiente repecho en Heredia dónde comenzó a imponerse un ritmo más alto. Hasta Ozaeta, lugar de firmas del día, fuimos a ritmo de caza de una fuga valiente que no prosperó en un primer momento, ya que el implacable ritmo impuesto por el resto dio al traste con ella, aunque luego en el sprint sí lo hizo.
Me encanta cómo de una etapa de final de temporada, dónde la mayoría de la gente parece estar deseando descansar, en nuestra sociedad la convertimos en una jornada animada y con suspense hasta el final. Estos son los entrenos que te dan la calidad que luego hay que aprovechar cuando uno hace marchas. A veces cuesta mantenerse en los primeros puestos del pelotón pero el día que se consigue se demuestra que cada uno va mejorando a su ritmo.
Estas son las fotos que saqué de esta jornada:
A la vuelta, ya a menor ritmo, volvimos charlando de lo humano y lo divino para acabar en Vitoria con 3 horas de pedaleo y 80 kms. más para la buchaca.
En el plano personal me noté falto de ritmo en los últimos kilómetros pero aguanté bien en la zona noble del pelotón así que me doy por satisfecho. Ojalá acabe el año que viene por estas fechas en la mismas condiciones.
El próximo finde espero que el tiempo respete y podamos hacer la tradicional Subida a Oro como colofón final del Concurso Social de la S.C.V.
Me encanta cómo de una etapa de final de temporada, dónde la mayoría de la gente parece estar deseando descansar, en nuestra sociedad la convertimos en una jornada animada y con suspense hasta el final. Estos son los entrenos que te dan la calidad que luego hay que aprovechar cuando uno hace marchas. A veces cuesta mantenerse en los primeros puestos del pelotón pero el día que se consigue se demuestra que cada uno va mejorando a su ritmo.
Estas son las fotos que saqué de esta jornada:
A la vuelta, ya a menor ritmo, volvimos charlando de lo humano y lo divino para acabar en Vitoria con 3 horas de pedaleo y 80 kms. más para la buchaca.
En el plano personal me noté falto de ritmo en los últimos kilómetros pero aguanté bien en la zona noble del pelotón así que me doy por satisfecho. Ojalá acabe el año que viene por estas fechas en la mismas condiciones.
El próximo finde espero que el tiempo respete y podamos hacer la tradicional Subida a Oro como colofón final del Concurso Social de la S.C.V.
P.D. Pincha aquí y verás que recuerdos... http://jordiescrihuela.blogspot.com/search/label/Vitoria-Gasteiz
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